INSTAGRAM, SACANDO EL FOTOGRAFO QUE LLEVAMOS DENTRO

Mejores prácticas. 

Si hace 10 años alguien nos hubiese dicho que todos seríamos fotógrafos profesionales, probablemente habríamos dudado de la salud mental de nuestro interlocutor, pero la red social creada por Kevin Systrom hace apenas casi 6 años nos ha hecho sentir así. Es la magia del instagram. Cualquier foto medianamente decente, se transforma a través de filtros en algo estéticamente agradable. Instagram es fruto de los tiempos. La tecnología que ha hecho que todos podamos cargar una cámara decente encima con capacidad instantánea de compartir no existía hace unos años. Coincidencia de deseos -que no sabíamos que teníamos- y de disponibilidad.

Como toda red social, Instagram tiene sus particularidades, con sus ventajas y desventajas. Vamos a revisarlas.
Lo primero, claramente, Instagram es una red gráfica. Busca compartir imágenes. Nuestras imagénes. Podemos compartir ideas, pero la imagen es el centro de un post de instagram. Esto conlleva que la red sea mucho más sensible a la hora de usar material ajeno. El principal fallo que una persona puede cometer en esta red es apropiarse de material ajeno sin citar la fuente. Tanto es así que la aplicación como tal no permite dar “compartir” o “RT” como otras redes y para hacerlo hay que instalar apps adicionales como regrann. Generalmente éstas crean un sello con el nombre del orgiinario de la imagen antes de postearla, pero es imporante asegurarse que lo hemos establecido de esta forma o que en el texto incluido reconozcamos la autoría.

Esto nos lleva al punto dos: si bien Instagram se centra en imágenes, las imágenes deben incluir algun texto explicativo o “caption”  a menos que sean algo como citas de inspiración que llevan ya su propio mensaje. Incluso en estos casos y por encima de otras redes se recomienda crear nuestros propios gráficos con citas, pudiendo usar alguna de nuestras fotos como fondo. Existen varios websites que permiten esto, canva.com quizas uno de los más completos.
Si bien todas las redes sociales usan los famosos #Hashtags, ninguna con mayor importancia que instagrann. Los hahtags permiten organizar por tema las millones de fotos en la aplicación pero es importante mantener cierta cordura. Una foto de un amanecer en Las terrenas podria incluir hashtags como #Amanecer #Sunrise #Playa #LasTerrenas pero continuar con #Blessed #Feliz #Bendecido #Calorcito #Arena etc es exagerado especialmente si tambien se comparte la foto en otras redes. Piense en los hashtags como la herramienta que facilitará que otros encuentren su foto y será más fácil decidir cuales son los adecuados.

Esto es otro punto: como decíamos en un inicio, cada red tiene su particularidad. Instagram permite compartir de manera automática con varias redes, principalmente Facebook y Twitter. Pero hay una diferencia basica entre ambas. Tomando clara ventaja del hecho de que Instagram es propiedad de Facebook, los posts de Instagram se reproducen íntegros en Facebook. No así en twitter donde la foto aparece como un link y los textos quedan truncados. Esto se debe tomar en cuenta porque los usuarios de esta red no reciben con buen agrado posts que los obligan a visitar una pagina web. Hay maneras de conseguir publicar fotos en twitter directamente via el uso del hashtag #Twitter pero involucra una serie de pasos de programacion.

Si bien es facil y efectivo compartir fotos de instagram en facebook hay que recordar que son redes sociales distintas y que si el volumen de publicaciones en instagram es alto, habrá que escoger una que otro post para compartirlo en Facebook para no saturar nuestros contactos.
Tocando el tema de saturacion, si bien un par de selfies son bien recibidas hay que cuidar de no agobiar tampoco a los que nos siguen con publicaciones sin parar. Para marcas basta con un par de “posts” al dia, aunque las cuentas personales son más flexibles en este sentido.  Tambien para esto existen apps complementarias que permiten crear “collages” con varias fotos o incluso hacer slide shows que permiten compartir el mismo material sin invadir.

Desde su concepción Instagram ha tratado de evitar el uso comercial de la aplicación. Tiene por lo tanto, sus limitaciones. Una de las principales es el hecho de que no es “cliqueable” es decir, aun poniendo com texto una direccion de web, no crea un link que lleve a la página referida lo cual le quitea mucha funcionalidad. Tampoco se presta para todo tipo de negocios. Aquellos que tienen un claro atractivo visual pueden maximizar sus beneficios. Industrias que son usuarios naturales: moda, alimentos y bebidas, diseño y celebridades en sentido general. Otras empresas pueden hacer uso pero no de forma tan obvia. Una agencia de bienes raices puede publicar ofertas disponibles, y un par de fotos profesionales del personal. Una oficina de abogados podría preparar artes con informacion de utilidad sobre plazos de leyes, cursos, consejos legales etc y nuevamente una que otra foto del personal, con el mismo tipo de fotos que publicaría en linked in. Otros negocios tienen que buscar el ángulo adecuado. Los principales periódicos internacionales tomaron años antes de entrar, y lo han hecho con un enfoque claro en material gráfico de calidad, no en noticias.

Esto tiene mucho sentido por una razón: de todas las redes sociales la menos amistosa a la hora de interactuar con usuarios es Instagram. Una vez publicada una foto nuestros seguidores podran darle “me gusta” o hacer un comentario, pero no hay una forma de responder directamente a alguien. Uno puede contestar y citar al usuario, pero no es un proceso tan sencillo como en facebook o twitter. Por esta razón es razonable evitar topicos controversiales que generan todo tipo de comentarios. Estos comentarios pueden ser borrados, pero, nuevamente, el proceso no es tan simple como en otras redes y requieren de una supervisión constante, aunque recientemente ayudado con la integración de filtros que bloquean de manera automática contenido que incluya unas palabras pre-determinadas.

En cuanto al mejor uso de instagram para construir nuestra marca personal, se comienza por lo más obvio: un nombre de usuario que responda a nuestros intereses. Nombre y apellido si disponible es quizas la opcion mas recomendable, o el nombre del negocio si es algo comercial. Otras más en caso de estar ocupado: “Fulano de tal RD”, “Fulano Oficial” y así por el estilo.   Luego como en todas las redes, cuidar lo que se publica. En muchos casos es preferible ver la calidad de la foto con detenimiento antes de hacerla publica. La foto con más “likes” de la corta historia de la aplicación es una de Selena Gómez tomando una Cocacola, pero aunque luce muy casual fue hecha por fotográfos profesionales. Se puede usar una aplicación como Hootsuite para programar las fotos luego de depurarlas. Por otro lado las redes se supone que se tratan de interaccion. Dele like a fotos de otros, comente, agradezca comentarios. Asi se genera comunidad.
Finalmente, piense en instagram como su revista personal. Comparta contenido que a usted mismo le gustaría ver y además con la calidad con la que espera los demás le asocien.



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